El TELÉFONO
El móvil se encendió con una luz parpadeante al tiempo
que vibraba sobre la mesa.
Lo cogió y miró la pantalla:
ANA MARÍA 6069....................
ANA MARÍA 6069....................
Se levantó y salió fuera de la biblioteca. Recuperó la llamada de voz y tecleó el teléfono de Ana María.
- Dime.
¿Qué quieres?.
- Hola
Juan. Te llamaba para saber si vas a venir hoy a casa.
Unos segundos de silencio inundó aquel momento. Luego Juan contestó.
- No lo
se. No hagas comida para mi.
- ¿Vas
a llevar a Eduardo al tren?, recuerda que hoy a la 7 se van de campamento.- dijo
Ana María.
- No,
tampoco. Tengo una reunión importante hasta las 8 y no podré ir.
- ¿Cuál,
la de la entrevista?.
- Si
-, concluyó rápido Juan.
- ¿Pero
no fue la semana pasada?.
- Si,
pero la habían aplazado para hoy. Ah!,
y luego iré a ver el partido a casa de Jorge. Ira todo el grupo y seguramente acabará
tarde así que no me esperes, me quedaré a dormir en su casa.
A Juan le
remordía la conciencia cada vez que tenía que poner una excusa.
Al otro lado Ana María quedó sin habla por un momento. Luego
se despidió de él cerrando la llamada. Fue
a la mesa del salón y abrió el periódico. En la programación de televisión el partido lo
daban en diferido a las 6 de la tarde y no por la noche como dijo.
Recordó entonces que la mujer de Jorge le había dicho
que ellos se irían hoy a la casa de campo nada más salir su marido del trabajo. Por lo tanto no habría reunión entre amigos para ver el partido.
Ana María estaba
segura. Volvió a tomar el móvil y escribió un mensaje a Pedro.
“ Mi
marido no viene hoy. Tenemos hasta mañana para estar juntos. Nos vemos en el bar de la estación a las
7,30. Hasta luego amor.